Las varices son una condición médica que afecta a un considerable número de personas en todo el mundo, y representan un problema de salud que va más allá de su apariencia superficial. Este trastorno vascular que está caracterizado por venas dilatadas y retorcidas, no sólo genera preocupaciones estéticas, sino que también puede provocar molestias físicas significativas. Desde la sensación de pesadez en las piernas hasta el riesgo de complicaciones más graves, las varices pueden afectar la calidad de vida de las personas que las padecen.
En medio de los enfoques tradicionales para abordar las varices, la electroestimulación emerge como una solución innovadora y efectiva. Este método, que utiliza impulsos eléctricos para estimular los músculos y mejorar la circulación sanguínea, ha capturado la atención de aquellos que buscan alternativas más allá de los tratamientos convencionales. A medida que la tecnología avanza, la electroestimulación se posiciona como una solución prometedora para aliviar los síntomas de las varices y, en algunos casos, incluso revertir sus efectos.
En este blog, exploraremos a fondo el fenómeno de las varices, comprendiendo sus causas, síntomas y consecuencias. Nos sumergiremos en el fascinante mundo de la electroestimulación, desentrañando sus fundamentos y examinando cómo puede convertirse en un aliado valioso en la lucha contra las varices.
Acompáñanos y descubre además cómo la tecnología de electroestimulación de Onnafit puede ofrecer soluciones prácticas y novedosas para abordar una problemática de salud tan extendida como puede ser eliminar las varices.
¿Qué son las varices y por qué son un problema de salud?
Las varices son venas dilatadas y retorcidas que se desarrollan, comúnmente, en las piernas y los tobillos. Este fenómeno ocurre cuando las válvulas unidireccionales que normalmente dirigen el flujo sanguíneo hacia el corazón no funcionan correctamente, provocando una acumulación de sangre en las venas. Este estancamiento de la sangre ejerce presión sobre las paredes de las venas, haciendo que se dilaten y se vuelvan visibles bajo la superficie de la piel.
Las causas de las varices son diversas y pueden incluir factores genéticos, cambios hormonales, embarazo, obesidad, y pasar largos períodos de tiempo de pie o sentado. Cuando estas condiciones predisponentes se combinan, aumenta la probabilidad de desarrollar varices.
¿Qué factores afectan a la aparición de las varices?
- Genética: La predisposición genética desempeña un papel crucial en la aparición de varices. Si hay antecedentes familiares de esta condición, es más probable que una persona la desarrolle.
- Cambios Hormonales: Los cambios hormonales, especialmente durante el embarazo y la menopausia, pueden contribuir al debilitamiento de las paredes venosas.
- Estilo de Vida Sedentario: Permanecer mucho tiempo de pie o sentado puede dificultar el retorno eficiente de la sangre al corazón, contribuyendo así al desarrollo de varices.
- Obesidad: El exceso de peso ejerce presión adicional sobre las venas de las piernas, aumentando el riesgo de desarrollar varices.
Principales síntomas de la aparición de las varices
Las varices pueden manifestarse con una variedad de síntomas, siendo los más comunes:
- Dolor o sensación de pesadez: Las personas con varices a menudo experimentan dolor en las piernas, acompañado de una sensación de pesadez.
- Picazón o ardor: La piel alrededor de las venas varicosas puede volverse irritable, causando picazón o ardor.
- Calambres nocturnos: Los calambres en las piernas, especialmente durante la noche, son otra manifestación común.
- Cambios en la piel: Las varices avanzadas pueden llevar a cambios en la coloración de la piel, úlceras venosas y otros problemas cutáneos.
Las complicaciones asociadas con las varices pueden ser más serias, incluyendo la formación de coágulos sanguíneos, úlceras venosas, e incluso hemorragias en casos extremos. Además del impacto físico, las varices pueden afectar la autoestima y la calidad de vida de quienes las padecen. Comprender a fondo estas implicaciones es crucial para abordar las varices de manera integral y buscar soluciones efectivas, como la electroestimulación, que exploraremos más adelante en este blog.
¿Qué tipo de varices existen?
Hay varios tipos de varices clasificadas según su tamaño, ubicación y características. Aquí te describimos algunos de los tipos de varices más comunes:
Varices Tronculares o Safenianas:
Son las varices más grandes y afectan a las venas principales llamadas safenas. Pueden ser visibles en la superficie de la piel y a menudo se asocian con venas varicosas más pequeñas.
Venas Reticulares:
Son venas más pequeñas que se encuentran debajo de la superficie de la piel, con un diámetro mayor que las venas telangiectasias pero menor que las varices tronculares. A menudo se presentan como líneas finas y azuladas.
Telangiectasias o Arañas Vasculares:
También conocidas como venas en forma de araña, son pequeñas venas dilatadas que aparecen cerca de la superficie de la piel. Tienen un aspecto similar a una telaraña o una ramificación de líneas rojas o azules.
Varices Perforantes o Comunicantes:
Conectan las venas superficiales con las venas profundas. La insuficiencia de estas válvulas puede provocar la acumulación de sangre en las venas superficiales, contribuyendo a la formación de varices.
Varices Pélvicas:
Se encuentran en la región pélvica y pueden estar asociadas con problemas en las venas de la pelvis. A menudo se asocian con síntomas como dolor pélvico y pueden requerir un enfoque específico de tratamiento.
Varices Secundarias o Postflebíticas:
Se desarrollan como resultado de una trombosis venosa profunda (TVP) previa. Pueden ocurrir después de una obstrucción venosa y afectar las venas profundas.
Varices Estéticas:
Aunque todas las varices tienen un componente estético, el término «varices estéticas» se utiliza a menudo para referirse a aquellas que, aunque no causan molestias significativas, son tratadas por razones cosméticas.
Es fundamental tener en cuenta que la gravedad de las varices puede variar, y su tratamiento puede ir desde medidas conservadoras, como cambios en el estilo de vida y el uso de medias de compresión, hasta procedimientos médicos más invasivos, como la escleroterapia, la ablación láser y, en casos más avanzados, la cirugía. El tratamiento adecuado dependerá del tipo y la gravedad de las varices, así como de los síntomas que presenten. Se recomienda consultar a un profesional de la salud para obtener un diagnóstico y un plan de tratamiento personalizado.

Electroestimulación para tratar las varices
La electroestimulación es una técnica que utiliza corrientes eléctricas de baja intensidad para estimular los músculos y mejorar diversas funciones fisiológicas. En el contexto del tratamiento de las varices, la electroestimulación se enfoca en activar y fortalecer los músculos de las piernas, favoreciendo así una mejor circulación sanguínea y aliviando los síntomas asociados a la aparición de las varices.
«Esta estimulación eléctrica activa los músculos, dando lugar a una mejora significativa en el flujo sanguíneo».
En una sesión de tratamiento mediante electroestimulación, los músculos experimentan impulsos eléctricos que generan contracciones musculares controladas y profundas. Esta estimulación eléctrica activa los músculos, dando lugar a una mejora significativa en el flujo sanguíneo. Este proceso facilita el retorno venoso y contribuye a reducir la presión sobre las venas afectadas por las varices.
Pero la electroestimulación no sólo se utiliza para tratar los síntomas visibles de las varices, sino que también aborda la causa subyacente al fortalecer la musculatura, mejorando la circulación y promoviendo un sistema venoso más saludable.
¿Qué beneficios aporta la electroestimulación?
La electroestimulación tiene infinidad de beneficios tanto a nivel físico como a nivel de la salud en general pero, en este caso, nos vamos a centrar en el beneficio de la electroestimulación en los referente a las varices:
- Mejora de la Circulación: La electroestimulación favorece la circulación sanguínea al estimular la contracción y relajación de los músculos, lo que facilita el retorno venoso y reduce la congestión vascular.
- Fortalecimiento Muscular: Al fortalecer los músculos de las piernas, la electroestimulación contribuye a un sistema venoso más eficiente, disminuyendo la presión sobre las venas y previniendo la formación de varices.
- Reducción de la Sensación de Pesadez: La mejora en la circulación sanguínea y el fortalecimiento muscular ayudan a aliviar la sensación de pesadez en las piernas, uno de los síntomas comunes asociados con las varices.
- Prevención de Complicaciones: Al abordar la causa subyacente de las varices, la electroestimulación puede contribuir a prevenir complicaciones más graves, como la formación de coágulos sanguíneos y úlceras venosas.
- Complemento a Otros Tratamientos: La electroestimulación puede ser utilizada de manera complementaria a otros tratamientos médicos, como la presoterapia, ofreciendo una perspectiva integral para el manejo de las varices.
¿Cómo funciona la Electroestimulación Onnafit en las Varices?
La electroestimulación de Onnafit se utiliza para tratar las varices de forma efectiva indolora y segura.
Este sistema se basa en mejorar la circulación sanguínea y fortalecer los músculos de las piernas. Su mecanismo de acción aborda directamente las causas y síntomas de las varices, ofreciendo una alternativa no invasiva y eficaz. En este artículo, exploraremos en detalle cómo opera esta técnica, respaldada por estudios científicos que confirman su eficacia.

Beneficios de utilizar Onnafit para tratar las varices
Los impulsos eléctricos de la electroestimulación Onnafit activan eficazmente los músculos de las piernas. Esta estimulación controlada induce contracciones musculares que mejoran la circulación venosa al facilitar el retorno eficiente de la sangre al corazón.
Al activar los músculos de las piernas, la electroestimulación contribuye a reducir la congestión venosa, disminuyendo la presión sobre las venas y previniendo la formación de varices.
La repetición de contracciones musculares fortalece las paredes de las venas, mejorando su elasticidad y resistencia. Esto ayuda a prevenir la dilatación excesiva de las venas y reduce la probabilidad de que se desarrollen varices.
Además, la electroestimulación de Onnafit facilita el flujo sanguíneo al estimular la acción muscular, evitando la acumulación de sangre en ciertas áreas y promoviendo una circulación más uniforme.
Un sistema compacto que no ocupa espacio en tu centro de estética
- Es handsfree: El sistema EMS de Onnafit es handsfree, es decir, manos libres, lo que quiere decir que el técnico puede aplicar el tratamiento de forma programada, y sin necesidad de ejercer una manipulación constante en el cliente durante el tratamiento.
- Donde quieras: Gracias a que es compacto y wireless, puedes aplicar el tratamiento en cualquier lugar.
- Transportable y Ergonómico: No ocupa espacio, así que puedes tenerlo en cualquier lugar de tu clínica de estética.
- Posee todas las certificaciones de seguridad: Desde la FDA, ANVISA, INVIMA, CE, o la Agencia Española del medicamento, Onnafit cumple todas las leyes de producto y seguridad según la última ley MDR.
Conclusión sobre electroestimulación varices
La electroestimulación es una opción útil y no invasiva para mejorar la circulación, fortalecer la musculatura de las piernas y aliviar molestias asociadas a las varices. Ayuda a reducir la pesadez, prevenir complicaciones y mejorar la calidad de vida, especialmente cuando se combina con otros hábitos saludables y un seguimiento profesional adecuado.
Preguntas frecuentes sobre electroestimulación varices
¿Dónde no usar electroestimulación?
La electroestimulación presenta contraindicaciones claras. No se debe aplicar cerca de equipos médicos electrónicos como marcapasos o bombas de insulina, ya que podría interferir con ellos. Tampoco es seguro usarla en el corazón o el cuello, pues podría afectar el ritmo cardíaco o la presión arterial. Además, es crucial evitar su uso en zonas con heridas abiertas, lesiones cutáneas o fracturas no diagnosticadas.
Las mujeres embarazadas deben abstenerse de usarla en el abdomen y la pelvis. Finalmente, está prohibida para personas con cáncer o epilepsia debido al riesgo de complicaciones. Se aconseja siempre consultar a un profesional de la salud antes de iniciar el tratamiento si se tiene alguna condición médica previa.
¿Es buena la estimulación eléctrica para las venas varicosas?
La estimulación eléctrica no es un tratamiento efectivo para corregir las venas varicosas, ya que no resuelve el problema subyacente de las válvulas venosas defectuosas. Aunque puede mejorar temporalmente la circulación y aliviar síntomas como la pesadez o hinchazón en las piernas, no puede eliminar las varices ni corregir la disfunción estructural de las venas.
Los tratamientos recomendados para las venas varicosas incluyen medias de compresión, cambios en el estilo de vida, y procedimientos médicos como escleroterapia o ablación con láser¿Qué es lo más efectivo para las varices?. Si tienes venas varicosas, lo mejor es consultar a un médico especialista para evaluar el tratamiento adecuado según la gravedad del caso.
¿Qué es lo más efectivo para las varices?
El uso de la electroestimulación requiere ciertas precauciones para garantizar su seguridad. No debe aplicarse cerca de dispositivos médicos como marcapasos o bombas de insulina, ni en zonas sensibles como el corazón o el cuello, para evitar alteraciones en el ritmo cardíaco o la presión arterial. Asimismo, se debe evitar su uso en áreas con heridas, lesiones cutáneas o fracturas, y las mujeres embarazadas no deben aplicarla sobre el abdomen o la pelvis. Está contraindicada en personas con cáncer o epilepsia, y siempre se recomienda consultar a un profesional de la salud antes de utilizarla si existen condiciones médicas previas.
¿Cuál es el mejor ejercicio para eliminar las varices?
El mejor ejercicio para prevenir y aliviar las várices son aquellas actividades que mejoran la circulación y fortalecen los músculos de las piernas, favoreciendo el retorno venoso. Algunos de los más efectivos son:
- Caminar: Es una actividad de bajo impacto que estimula el flujo sanguíneo en las piernas. Se recomienda caminar al menos 30 minutos diarios.
- Bicicleta o ciclismo estático: Pedalear ayuda a activar la circulación y fortalece los músculos de las piernas.
- Nadar: La natación mejora la circulación sin ejercer presión adicional sobre las venas.
- Ejercicios específicos de piernas: Movimientos como elevar los talones mientras estás de pie (puntillas) o hacer círculos con los pies mientras estás sentado o acostado son muy beneficiosos.
- Yoga: Posturas como la «piernas contra la pared» (Viparita Karani) promueven el drenaje y alivian la presión en las venas.
Es importante complementar el ejercicio con hábitos saludables como mantener un peso adecuado, evitar estar mucho tiempo de pie o sentado sin moverse, usar medias de compresión si es necesario y consultar con un médico para un tratamiento adecuado si las várices son severas.
¿Es bueno el estiramiento para las venas varicosas?
Sí, el estiramiento es beneficioso para las venas varicosas, ya que mejora la circulación, reduce la rigidez muscular y promueve el retorno venoso en las piernas. Al estirar los músculos, especialmente los de las piernas, se favorece el flujo sanguíneo, lo que ayuda a aliviar la presión en las venas y disminuye la sensación de pesadez o hinchazón.
Algunos estiramientos útiles incluyen:
- Flexión y extensión de los pies: Estirando el tobillo hacia arriba y hacia abajo para activar los músculos de la pantorrilla.
- Estiramientos de pantorrilla: Apoyando las manos en una pared y llevando una pierna hacia atrás mientras mantienes el talón en el suelo.
- Postura de piernas elevadas: Acostarte con las piernas contra la pared (Viparita Karani) para aliviar la presión venosa.
Aunque el estiramiento es útil, no sustituye otros cuidados como el ejercicio regular, el uso de medias de compresión, o el seguimiento médico en casos avanzados de venas varicosas.
¿Qué pasa si masajeo mis varices?
Masajear las varices puede aliviar la pesadez, mejorar la circulación y reducir la hinchazón, pero no las elimina. Debe hacerse con movimientos suaves y ascendentes, evitando zonas inflamadas. Un masaje mal aplicado puede empeorar la situación o causar complicaciones si hay coágulos. Por eso, debe realizarse con cuidado y como apoyo, no como tratamiento principal.

¿Qué otros métodos pueden ayudar a mejorar las varices además de la electroestimulación?
Ejercicio físico regular (caminar, nadar, bicicleta). Uso de medias de compresión. Evitar estar de pie o sentado por largos periodos. Mantener una alimentación saludable y controlar el peso. Consultar con un especialista sobre tratamientos médicos si es necesario.
Aparatos para estimular la circulación de las piernas
La circulación sanguínea en las piernas juega un papel fundamental en la salud general del organismo. Sin embargo, el sedentarismo, las largas jornadas de trabajo en posición estática y ciertas condiciones médicas pueden afectar el flujo sanguíneo, generando molestias como hinchazón, pesadez y varices. Para mejorar esta situación, existen diversos dispositivos diseñados para estimular la circulación y aliviar estos síntomas.
Aparato para el retorno venoso de las piernas
Electroestimuladores musculares
Los electroestimuladores musculares (EMS) utilizan impulsos eléctricos de baja frecuencia para activar los músculos y favorecer el retorno venoso. Son especialmente útiles para personas con movilidad reducida, ya que permiten ejercitar los músculos sin necesidad de esfuerzo físico. Además, ayudan a reducir la sensación de piernas cansadas y a prevenir la formación de coágulos en quienes permanecen sentados por largos periodos.
Presoterapia
La presoterapia es un tratamiento que emplea un sistema de compresión neumática a través de botas inflables que ejercen presión en las piernas de manera rítmica y controlada. Este proceso facilita el drenaje linfático, mejora la circulación y reduce la retención de líquidos. Se recomienda especialmente para personas con problemas circulatorios, insuficiencia venosa o tendencia a la acumulación de líquidos en las extremidades inferiores.
Masajeadores de piernas con vibración y calor
Los masajeadores eléctricos combinan movimientos de vibración, compresión y, en algunos casos, terapia de calor para estimular el flujo sanguíneo y relajar los músculos. Su uso regular contribuye a aliviar la tensión muscular, reducir la fatiga y mejorar la circulación en personas que permanecen mucho tiempo de pie o sentadas.
Plataformas de vibración
Las plataformas vibratorias generan microvibraciones que activan la circulación y fortalecen los músculos de las piernas. Su uso es común en fisioterapia y rehabilitación, ya que permite mejorar el flujo sanguíneo sin necesidad de actividad física intensa. Además, favorece la oxigenación de los tejidos y puede ayudar a prevenir problemas vasculares asociados con la inactividad.
Pedales eléctricos para piernas
Estos dispositivos simulan el pedaleo de una bicicleta de manera asistida, permitiendo el movimiento de las piernas sin esfuerzo. Son ideales para personas mayores o con movilidad reducida, ya que activan el flujo sanguíneo sin impacto en las articulaciones. Su uso regular ayuda a reducir la hinchazón en pies y tobillos, mejora la movilidad y tonifica los músculos de las extremidades inferiores.
Medias de compresión electrónica
Las medias de compresión han sido utilizadas tradicionalmente para mejorar la circulación, pero algunos modelos avanzados incorporan tecnología electrónica que ajusta la presión en distintos puntos de la pierna. Este tipo de compresión dinámica favorece el retorno venoso, previene la aparición de varices y reduce la inflamación en quienes pasan muchas horas en la misma posición.
Spinning y varices
El spinning es una de las actividades cardiovasculares más populares por su intensidad y efectividad para mejorar la resistencia y quemar calorías. Sin embargo, cuando hablamos de varices, es normal preguntarse si este tipo de ejercicio puede ser beneficioso o, por el contrario, perjudicial.
En general, practicar spinning de manera moderada y controlada puede ser positivo para la circulación sanguínea. El movimiento de pedaleo favorece el retorno venoso, fortaleciendo los músculos de las piernas, lo que ayuda a bombear mejor la sangre de vuelta al corazón. Esto puede contribuir a aliviar la sensación de piernas pesadas y a mejorar ciertos síntomas leves de insuficiencia venosa.
Sin embargo, hay que tener en cuenta algunas precauciones importantes:
- Evitar sesiones demasiado intensas o prolongadas, que puedan aumentar la presión venosa en exceso.
- Controlar la posición: es recomendable no permanecer largos periodos de pie sobre la bicicleta, ya que podría empeorar la presión en las venas.
- Escuchar al cuerpo: si se nota dolor, hinchazón o molestias inusuales durante o después de las sesiones, es fundamental consultar con un especialista.
En casos de varices avanzadas o con complicaciones, es importante pedir consejo médico antes de iniciar o continuar con actividades de alta intensidad como el spinning.
Conclusión: el spinning puede ser una buena opción para mejorar la circulación si se practica con sentido común y adaptado a las necesidades individuales. En cualquier caso, cuidar la salud vascular debe ser siempre una prioridad.

Tens en pantorrilla
Usar TENS en las pantorrillas puede aliviar calambres y sobrecargas al reducir la sensación de dolor, pero hay que tener cuidado si hay varices. No debe colocarse sobre zonas inflamadas o doloridas y siempre es mejor consultar con un especialista antes de usarlo. No trata las varices, solo ayuda a aliviar molestias musculares de forma puntual.
¿Es bueno el jacuzzi para las varices?
El jacuzzi no es recomendable para personas con várices, ya que el calor del agua produce una dilatación de las venas que puede empeorar la sensación de pesadez, hinchazón y dolor en las piernas. Además, permanecer sentado durante mucho tiempo sin moverse en un entorno caliente puede dificultar aún más el retorno venoso y, en algunos casos, aumentar el riesgo de complicaciones como trombosis superficial.
Como alternativa, se aconsejan duchas tibias o con contraste frío-tibio, elevar las piernas al descansar, usar medias de compresión si lo indica un profesional y realizar ejercicio suave como caminar o nadar. Ante la presencia de várices o síntomas frecuentes, lo más adecuado es consultar a un especialista en cirugía vascular para recibir orientación personalizada.
Venas finas: causas comunes y cuándo prestarles atención
Las arañas vasculares son pequeñas venas dilatadas que se ven bajo la piel como líneas rojizas o azuladas. Aunque a menudo se consideran un problema estético, pueden ser una señal de mala circulación. Sus causas incluyen la genética, cambios hormonales, el envejecimiento y un estilo de vida sedentario.
A diferencia de las varices, las arañas vasculares son más pequeñas y superficiales, pero pueden ser un primer síntoma de insuficiencia venosa. Algunas personas experimentan sensación de pesadez o picor en las piernas, por lo que es importante vigilarlas.
Para cuidar la salud venosa, es clave activar la musculatura. La electroestimulación es una herramienta útil para mejorar la circulación sin impacto, siendo ideal para personas con un estilo de vida sedentario o que no pueden hacer ejercicio convencional.
¿Cuándo son peligrosas las varices en las piernas?
Las varices suelen considerarse, en muchos casos, un problema estético o de molestias leves. Sin embargo, en ciertas circunstancias, pueden derivar en complicaciones que requieren atención médica urgente. A continuación, te explico los principales signos de alerta:
Señales de riesgo
Las varices pueden volverse peligrosas cuando aparecen síntomas adicionales como:
- Aumento repentino del dolor, hinchazón intensa o sensación de pesadez en la pierna.
- Cambios en la piel: zonas enrojecidas, calientes, decoloradas, marrones o con picor persistente.
- Úlceras venosas (heridas abiertas) cerca del tobillo que no cicatrizan con facilidad.
- Sangrado desde una vena que puede ocurrir tras un golpe leve.
- Formación de coágulos superficiales (tromboflebitis superficial): dolor local, enrojecimiento y vena “endurecida” bajo la piel.
- En casos menos comunes: riesgo de trombosis venosa profunda (DVT), con síntomas como dolor fuerte, calor, enrojecimiento y aumento brusco de volumen de la pierna. Esto puede derivar —si el coágulo se desprende— en una embolia pulmonar, que es una emergencia médica.
Por qué ocurren esas complicaciones
El principal problema de las varices es que las válvulas venosas se debilitan o no funcionan bien, lo que hace que la sangre “se estanque” y genere más presión en las venas. Con el tiempo, ese exceso de presión daña las paredes venosas y los tejidos circundantes.
Cuando no se tratan, pueden evolucionar hacia insuficiencia venosa crónica, con piel alterada, edema, endurecimiento del tejido y úlceras.
Qué hacer si notas esos síntomas
- Consulta cuanto antes con un especialista en venas o un angiólogo.
- Que te realicen estudios de imagen (por ejemplo, ecografía Doppler) para descartar coágulos o evaluar el estado de las venas profundas.
- Mientras esperas (o si el caso es leve), aplicar medias de compresión adecuadas, elevar las piernas, evitar mucho tiempo de pie o sentado y cuidar el peso corporal pueden ayudar a aliviar síntomas
¿Qué tan peligroso es que se te reviente una varice?
Que una variz reviente suele causar un hematoma doloroso o sangrado leve, pero no siempre es grave. Aun así, si el sangrado es abundante o la piel presenta cambios como enrojecimiento, calor o úlceras, hay riesgo de complicaciones. En esos casos, conviene elevar la pierna, aplicar presión y acudir al médico de inmediato.




